Ángel Gradas

Atlixco.  Tres de los 12 murales que tenía el  palacio municipal ya  no existen debido al sismo del pasado 19 de septiembre y a los trabajos de rehabilitación que se realizan al interior del inmueble.

El palacio de Atlixco era el  único en el estado de Puebla con murales en más del 80 por ciento de sus muros, trabajos artísticos que se plasmaron a lo largo de 19 años, así lo relató Juan Manuel Martínez Caltenco, pintor y muralista atlixquense, quien además es creador de nueve de los murales que existían y los cuales fue pintando a solicitud de los alcaldes panistas principalmente.

Fue en la época de Salvador Escobedo Zoletto, se comenzó.  El primero; Atlixco: historia, costumbres y tradiciones se plasmó sobre el muro que da entrada tanto al salón de Cabildos como a la oficina  presidencial, este mural se perdió.

Posteriormente siguieron los del cubo de la escalera donde se hace una representación del cosmos, las leyes de reforma y une espacio para los  hombres ilustres de Atlixco, esta última parte también se afectó en un 50 por ciento. Le siguió aquel donde se plasmó la visión que el artista tenía sobre la lucha obrero-sindical que marco la historia del hoy Pueblo Mágico. Para el gobierno de Manuel Vargas se plasma la leyenda de los volcanes y la mística historia de los dioses a los que veneraban los primero habitantes del Valle de Atlixco, en muros de la planta baja de palacio municipal.

Con el triunfo de Eleazar Pérez Sánchez, continua esta actividad de dejar plasmado su paso por el gobierno, pero no fue Caltenco quien se encargó de hacerlo, si no el muralista Polo Castellano, quien saliéndose del ritmo, pero a su estilo plasmo en la pared del lado derecho a la entrada de palacio municipal su visión de la lucha del bien contra el mal, este mural también se perdió con el terremoto.

Al regresar las administraciones panistas, se retoma el camino con Juan Manuel  Martínez Caltenco quien da forma y color a Villa Iluminada usando como lienzo  una de las enormes paredes libres que aún quedaban en el inmueble, a solicitud expresa del entonces presidente municipal Ricardo Camacho Corripio.

Con José Luis Galeazzi se pintan dos más, Atlixco; Pueblo Mágico y los 50 años del Huey Atlixcáyotl, perdiéndose también el 19 de septiembre el segundo, en su totalidad.

El muralista señaló: “el de Villa Iluminada desgraciadamente se perdió por completo, el de los hombres ilustres el 50 por ciento al igual que 50 años del Atlixcáyotl, en un  80 por ciento el de  Atlixco: Historia Costumbres y Tradiciones, pero  por seguridad se terminaron de derrumbar para que la rehabilitación de esos muros fuera la correcta”, informo el muralista.

Comentó que pese a esto no es difícil el poder reconstruirlos, “Basta con conservar aunque sea el 20 por ciento,  para retomar la idea, que claro yo tengo los bocetos y eso nos ayudara mucho al  momento de volverlos a pintar, porque eran un patrimonio  histórico”, señaló.

Al menos se necesitarian 15 meses, para recuperarlos, pero esto sucederá solo si el presidente en turno lo solicita, por ello invito a los atlixquenses a sumarse a la petición de rescatar esto trabajos que le daban vida color y hasta voz al  palacio municipal, porque contaban la historia de Atlixco.

“Desgraciadamente pocos inmuebles en el Estado pueden contener en sus muros la historia y el palacio municipal de Atlixco se había convertido en el único en la entidad poblana que estaba casi completamente ilustrado,  por ello es necesario, es parte de mi deber, solicitar se me permita recuperarlo”, señaló.

Es preciso señalar que el palacio municipal de Atlixco, contaba además con otros dos murales uno en lo que fuera originalmente la biblioteca municipal Presidente Juárez  y otro en el salón de Cabildo, ambos obra de Faustino Salazar y su hijo,  que fue el encargado de termina el de la biblioteca, debido a que la muerte de su padre impidió que se encargara de terminar el mural. Ambos murales, resistieron el embate del 19 de septiembre y se encuentran en óptimas condiciones.

Caltenco aclaro que los murales que se derrumbaron fue debido a que la pared no fue debidamente preparada antes de píntalos por ello el daño fue irreparable.