Angelina Gradas

Atlixco. Pese al llamado hecho a nivel local para que los atlixquenses le dieran una hora de respiro al planeta, el 90 por ciento del municipio mantuvo su ritmo de consumo de energía eléctrica acostumbrado.

En el zócalo de la ciudad la mitad del primer cuadro estuvo a oscuras y la otra mitad con luz, en medio de la penumbra solo brillaba algo, el mural de flores monumental, con luces en tonos verde, azul, amarillo y rosa, en tanto palacio municipal, la parroquia y la calle dos oriente se encontraban apagados.

En el resto de la mancha urbana los focos de los restaurantes, bares, cafeterías y de los domicilios, así como de las empresas grandes y plaza comerciales no se apagaron, ni el alumbrado público y como desde hace un trienio la iglesia del cerro de San Miguel no tiene iluminación pues no fue necesario bajar el interruptor para ella.

De igual forma ayudó que se recorrió de 20:30 a 21:30 horas el apagón, de esta forma los comercios establecidos del centro histórico bajaron la cortina apagando como de costumbre sus luces.

Para el regidor Fernando Chávez Escudero, pese a la poca respuesta, lo que se logró fue significativo y de resaltar en la suma de voluntades para apoyar al medio ambiente.

Cabe recordar que en este municipio desde hace 10 años el 100 por ciento de las luminarias en la vía pública fueron cambiadas por LED, una inversión que se continúa pagando pero que significaba un ahorro en el gasto por energía eléctrica para el municipio y una ayuda para el planeta.