Angelina B. Gradas

Atlixco. Sin la participación del área de Bienestar Animal local un grupo de ciudadanos lograron salvaguardar a ocho tlacuaches bebés, que se quedaron huérfanos debido a que su madre fue atropellada en el libramiento a Izúcar de Matamoros.

Los involucrados decidieron no llamar a este departamento responsable del, como su nombre lo dice, bienestar animal debido a que en anteriores ocasiones no han recibido respuesta de parte de la dependencia.

Además de que temieron que al igual que al varano liberado el año pasado, las crías de tlacuache fueran liberadas enviándolas a una muerte segura; “Los tlacuaches son animales muy complicados, al ser marsupiales, dependen de su mamá y aunque aparenten estar vivarachos y ya algo grandes tienen etapas de crecimiento que requieren de cuidados especiales y específicos si su mamá no está, pueden morir deshidratados o por problemas gástricos al recibir alimentos que no les corresponden”, comentó Liss Sánchez.

La importancia del rescate de estas ocho crías radica en que se trata de una especie endémica del municipio de Atlixco, la cual debido al crecimiento de la mancha urbana ha quedado inmersa de una ciudad que crece y les quita su hábitat natural.

Tras el reporte por parte de quien los rescató, fueron Juan Manuel Barrera y el regidor de ecología, Fernando Chávez Escudero quienes de manera coordinada lograron contactar con Flor del Bosques para poderlos llevar.

Lamentablemente el horario de cierre de esta reserva no les permitió entregarlos este lunes, por lo que las crías quedaron en resguardo del funcionario quien siguiendo las recomendaciones del veterinario de Flor del Bosque los alimentó. Será este martes cuando lleguen a su nuevo hogar.